viernes, 24 de marzo de 2017

LAS PRIMERAS PINTURAS DE LA CAPILLA SIXTINA. Parte IV

En la tercera posición se encuentran los frescos "El Cruce de Moisés por el Mar Rojo" del pintor Biagio D'Antonio  y   "La Vocación de los Apóstoles" realizado por Domenico Ghirlandaio.


Antes de comentar estas pinturas, quisiera adentrar al lector en la magnitud de las obras que se están comentando. En primer lugar debe destacarse su tamaño;  todos los cuadros tienen una altura promedio de 3,50 m y una longitud; algunos de 5,50 m y otros de 5,70 m.  es decir, cada uno tiene un área de trabajo de casi 20 m2, únase a esto que están ubicados a una altura de 5 metros aproximadamente, por lo que debían trabajarse en andamios, y finalmente, que se trata de "frescos", una técnica que requiere una velocidad de trabajo muy elevada para desarrollar un proceso creativo de tal magnitud.
Para realizar un fresco se deben seguir  los siguientes pasos; primero por una parte debe prepararse la superficie de trabajo, compuesta por una argamasa con cal y un árido muy fino formando algo así como un yeso, y por la otra deben prepararse los pigmentos que eran como una lechada también a base de cal, al colocarse el pigmento sobre la argamasa,  esta debe estar fresca, de tal modo que la cal del pigmento se mezcle con la cal de la argamasa y comience un proceso de fraguado conjunto, en este proceso , la cal contenida en ambos componentes se transforma en hidróxido de calcio lo que permite  que los colores permanezcan inalterables en el tiempo.  El tiempo de fraguado es de apenas 24 horas.  Para lograr hacer tantas actividades en tan corto tiempo, primero se dibuja la figura en un trozo de papel y luego se traslada a la argamasa fresca mediante perforaciones  que se atraviesan con un carboncillo, sobre este esbozo, se aplican entonces los pigmentos.  Aún cuando la mezcla haya fraguado,  se pueden  efectuar retoques en "secco", los cuales, si bien resaltaban la pintura recién terminada,  eran menos duraderos que la primera capa de pintura fraguada conjuntamente con el yeso.
Comenzaremos a comentar las pinturas de las estampillas  observando la imagen ampliada con mucho más detalle.
El Cruce de Moisés por el Mar Rojo fue la única pintura realizada por Biagio D'Antonio, pintor florentino también enviado por Lorenzo de Medici, quien era uno de los menos conocidos del afamado grupo. Si la comparamos con el resto de las pinturas realizadas, en ella se aprecia un ambiente mas bien oscuro, y sus colores son mucho menos vistosos que los de las otras.
En ella se representa el cruce de Moisés por el mar Rojo después que el faraón expulsara los hebreos de Egipto, exactamente representa el momento en que ya Moisés se hallaba del otro lado del mar y este se habia vuelto a cerrar, ahogando al ejercito Egipcio que los perseguía. 
Se afirma que en este cuadro el pintor coloca dos mensajes negativos hacia el papa, el primero que muestra el uniforme que viste el jefe de la caballería Egipcia a punto de ahogarse, con los colores del papa Sixto IV, y el segundo; que los edificios inundados de la zona Egipcia guardan relación con la capilla Sixtina, personalmente nos parece extremadamente rebuscado este simbolismo.

Lo que si está claro es el perro que ubicado en el extremo izquierdo del cuadro, en varias fuentes se comenta que este perrito pertenecía a Cossimo Rosselli y era la mascota de la faena, lo vemos en varias de las pinturas lo que evidentemente podria significar una burla hacia un ambiente tan sacrosanto como era la capilla.

Tercer Fresco Ala Norte "La Vocación de los Apóstoles".
Domenico Ghirlandaio, al igual que Boticelli era uno de los pintores mas renombrados del grupo que realizó los trabajos, también era uno de los más cercanos a Lorenzo de Medici en ese momento, El realizó dos de los cuadros de la serie; "La Vocación de los Apóstoles" y "La Resurrección de Cristo", este último se ubicaba en el extremos Oeste de la capilla, pero fue prácticamente destruido en 1522 al caerse el dintel de la estructura del cual formaba parte, No fue hasta el año 1572 que le fue encargada una nueva pintura con el mismo tema al  pintor flamenco, Hendrick van den Broeck.


Fragmento de la Resurrección de Cristo de Hendrick van den Broeck.
 La pintura de Ghirlandaio es considerada una de las mejores de todo el conjunto, si bien tiene un colorido más bien oscuro, la definición de cada uno de los personajes está magistralmente desarrollada, sobre todo los rostros de cada uno de ellos, muchos de los cuales se identifican con personajes de la época en que fue elaborado. Cada una de las figuras se inserta en el espacio, guardando una perspectiva casi exacta cuyo punto de fuga se ubica al fondo del paisaje. Ghirlandaio al igual que Leonardo da Vinci era muy cuidadoso con este tipo de detalle, no así Botticelli, ni el resto de los pintores del grupo.
 
El cuadro contiene tres escenas diferentes, al fondo se representa, hacia la izquierda,  la llamada de Cristo a Pedro y Andrés, este ultimo puede verse claramente como sostiene una red de pescador. Hacia la derecha en el mismo plano, Cristo llama a Juan y a Santiago, haciéndose acompañar de los dos primeros que son testigos del acto. En primer plano Cristo bendice a Pedro y Andrés.  El hecho de que los cuatro apóstoles fueran pescadores también tiene un significado alegórico pues de hecho, una vez convertidos en apóstoles pasan a ser "pescadores de hombres". Se puede observar además que el "llamamiento de Cristo" es el momento en el cual se genera la "vocación" de los apóstoles para que  sigan a Cristo y continúen el reclutamiento como primeros cristianos.


 Otra de las obras sobresalientes de Ghirlandaio lo constituye el fresco "La Adoración de los Reyes Magos" realizado  años mas tarde para el Hospital de los Inocentes en Florencia, también de una manufactura impecable.
 


Hoja filatélica con el fresco La Adoración de los Reyes Magos emitida por la "Orden de Malta"[1] 
En este fresco Ghirlandaio, al igual que muchos de sus colegas y discípulos, se "autorretrata" entre la multitud que adora los reyes, que puede observarse justo al lado de la estampilla inferior de la hoja filatélica.
Autorretrato de Domenico Ghirlandaio, detalle extraído de su obra La Adoración de los Reyes Magos"
Ahora bien para muchos está más que claro que la mejor obra de Ghirlandaio fue simplemente ser el MAESTRO de su gran discípulo Miguel Angel Bounarroti  quien llegó a su taller con apenas doce años,  en 1488,  también fue Ghirlandaio, un año después quién lo recomendara a Lorenzo de Medici cuando este andaba a la búsqueda de nuevos talentos para financiar su educación artística. 
JOSE BELLIDO DE LUNA, Santiago, Marzo 2017




[1] A efectos filatélicos "La Orden de Malta" no es un país, por tanto las estampillas que emite no pueden ser utilizadas en competencias en ningún nivel.