miércoles, 15 de marzo de 2017

LAS PRIMERAS PINTURAS DE LA CAPILLA SIXTINA. Parte III

Las Pinturas que aparecen en la segunda posición corresponden ambas a Sandro Boticelli;  En el muro Sur correspondiente a los temas del Antiguo Testamento se ubica el fresco  "Eventos de la Vida  de Moisés",  en el muro Norte correspondiente a  las escenas del Nuevo Testamento se  puede apreciar la pintura; "Las Tentaciones de Cristo".  Ambas  se incluyen en las series de estampillas que estamos analizando.

La imagen ampliada de la estampilla de la izquierda muestra con más detalle a continuación:

El cuadro nos muestra siete etapas de la vida de Moisés; que se leen como el alfabeto hebreo, de derecha a izquierda.
Escena 1 Moisés se enfrenta a un capataz egipcio por haber maltratado a un hermano hebreo.
Escena 2: Moisés en su huida a la tierra de los Medianitas.
Escena 3; Moisés dispersa a un grupo de pastores que molestaban  a las hijas de Jetro
Escena 4; Moisés acompaña a las hijas de Jetro a sacar agua del pozo; una de ellas, Séfora, se convertirá en su esposa.
Escena 5; Dios se le revela a Moisés en la zarza ardiente,
Escena 6; Moisés se descalza por orden de Dios ya que se encuentra en un lugar sagrado; en esta escena Botticelli recrea la escultura del Niño de la espina o Espinario, estatua de la época helenística que había sido donada a la ciudad por el propio Sixto IV en 1471 y que hoy puede ser visitada en el Museo Capitolino de Roma.

Escena 7; Moisés recibe las órdenes de Dios y guía al pueblo de Israel en una procesión triunfal escapando de la esclavitud de Egipto.
En el cuadro, al igual que en muchos otros de la serie, se muestran varios Robles, la constante alusión a este árbol en las pinturas se debe a que el nombre original del papa Sixto IV era Francesco de la "Rovira", que está directamente relacionado con el árbol del roble, de hecho el escudo papal que lo representa tiene la imagen de un roble (ver estampilla en la Parte I de esta serie de entradas), existen diferentes versiones de esta constante inclusión, la primera; que el grupo de pintores lo asumía como un "homenaje" directo a quien los había contratado, la segunda; que  simplemente fueron "obligados" a hacer esta constante referencia y la tercera hipótesis se refiere a que lo usaban simplemente para "congraciarse" con el papa y que este no se fijara en otros mensajes que estaban plasmados en las pinturas. Lo cierto es que específicamente en esta pintura aparecen mezclados los Robles con los Naranjos, que eran el símbolo de la familia Médici, lo cual puede interpretarse como un mensaje de "paz y convivencia" o todo lo contrario "Pinto un Roble porque me obligas pero también pinto un Naranjo de tu oponente".

Tercer Fresco Ala Norte "Las Tentaciones de Cristo".

Botticelli pinta, en la parte superior del cuadro, las tres tentaciones de Cristo tal como se relata en el Evangelio según Mateo. Acá se leen de izquierda a derecha; la primera muestra cuando el diablo, disfrazado de ermitaño, desafía a Cristo a convertir las piedras en pan, la segunda; al centro sobre la torre del templo,  el diablo persuadiendo a Cristo a que se lance desde la altura, la tercera; al extremo derecho, le está mostrando las riquezas del mundo, sin embargo, Cristo aleja al diablo, que en última instancia revela su verdadera forma diabólica, en esta escena  al lado de Cristo aparecen tres ángeles que han preparado una mesa para la celebración de la Eucaristía.

En primer plano, a una escala mucho mayor, Botticelli nos presenta varias escenas que tienen lugar en la celebración del sacrificio judío. El Sumo Sacerdote recibe el tazón lleno de sangre procedente de los sacrificios de animales que los pecadores llevaban como ofrenda para limpiar sus pecados. Llama la atención la preponderancia que le da Botticelli a la escena del sacrificio judío por sobre las escenas de las tentaciones de Cristo, que son las que en definitiva dan nombre al cuadro,   nuestro criterio es que el artista considera en este caso a Jesús como el Sumo Sacerdote y por ello es el verdadero protagonista del fresco.
En el vértice central del cuadro, se observa un Templo, en clara alusión al Templo de Salomón, para el cual Botticelli tomó como referencia  el edificio del Hospital del Espíritu Santo ubicado muy cerca de la capilla Sixtina, que hoy se conserva exactamente tal como aparece en la pintura.

Antiguo Hospital del Espíritu Santo, hoy Museo Histórico Nacional del Arte Sanitario.
Otro detalle significativo de la pintura es la mujer que aparece media oculta en la multitud, quien lleva una ofrenda de unas gallinas en un cesta; esta figura es una recreación de un cuadro realizado por el propio Botticelli años antes  "El Regreso de Judith a Bethulia" en el cual Abra, la criada,  acompaña a Judith, llevando en su cabeza una cesta con la Cabeza de Holofernes.

A la izquierda la imagen ampliada de la Mujer del cuadro, a la derecha "El Regreso de Judith a Bethulia", cuadro de Botticelli que actualmente puede ser contemplado en la Galería Uffizzi en Florencia.

Años después, en la propia Capilla Sixtina,  Miguel Ángel recrearía una vez más la escena de Judith, esta vez representándose el mismo en la cabeza de Holofernes.

JOSE BELLIDO DE LUNA, Santiago, Marzo 2017.