HERIBERTO VOGLER MEYER
Ricardo Boizard G.
Querido amigo Tito durante casi 50 años. Te ganaste durante tu larga vida, cada persona que se
paraba frente a ti, por tu forma franca y espontánea de ser. Cuando fuiste
dueño de la Hostería El Arrayán, recibías a cuanto amigo tenías, nos hacías
disfrutar y no nos daban ganas de terminar nuestras charlas contigo. A los
amigos filatelistas, nos ofrecías, a precios mínimos, sendos almuerzos una vez al año, como una
forma de reunirnos en franca amistad.
Preparabas los remates junto
a don Alfredo Krause cerca de la cordillera y entregabas tu persona a todas las
actividades de nuestra Institución. Fuiste Director y luego de algunos años,
cuando te dejaste crecer tu barba, nos deleitabas todos los almuerzos de
Navidad, vestido de Viejo Pascuero y nos llevabas a cada uno de nosotros un
regalo con una tarjeta personalizada.
En realidad, tu figura y
forma de ser, entre latina y germana, nos hacía comprender lo bueno que era
enfrentar la vida con optimismo y sin
rencor ni venganza hacia los demás.
Fuiste bueno desde el fondo
de tu alma y nosotros sabremos recordarte perenne desde el fondo de nuestro
corazón.
No pudimos despedirte como
hubiéramos querido, porque no fuimos informados de tu partida, pero en todo
caso te deseamos que descanses en paz, amigo Tito
