Scott 85F
Este sello de Estados Unidos, emitido en 1867, es tan raro como el sello de 1 centavo Franklin con grill tipo Z. La única diferencia es que los dos ejemplares conocidos del Lincoln Z se encuentran en colecciones particulares, y por lo tanto están disponibles para el mercado filatélico.
La historia del descubrimiento de este sello, es una demostración de que en filatelia nunca está dicha la última palabra y que la aparición de nuevos sellos y variedades desconocidas, o más ejemplares de sellos que se consideraban piezas únicas, siempre es posible.
El sello base fue impreso por la National Bank Note Co. El diseño es obra de James Macdonough y el punzón fue grabado por Joseph Ourdan, uno de los principales maestros grabadores de retratos de esa firma impresora.
El grill del tipo Z (11 x 14 mm.) fue descubierto y descrito por William L. Stevenson en 1915-16, y en sus estudios, no mencionaba que los sellos de 15 cts. con la efigie de Lincoln existieran con esa variedad de grillado.
A comienzos de 1960 la firma de subastas Robert A. Siegel recibió la colección Newbury para su dispersión. En el proceso de revisión de los sellos y preparación de los lotes, uno de sus especialistas encontró un sello de Lincoln de la emisión de 1867 con una impronta de grill que parecía ser del tipo Z.
Esta pieza era desconocida y no estaba catalogada. El ejemplar fue presentado al experto Elliott Perry, quien determinó que el sello era legítimo.
Ejemplar descubierto en 1960
La publicidad que se generó con este descubrimiento hizo que muchos coleccionistas y comerciantes filatélicos revisaran cuidadosamente las existencias que tenían de este sello, y a las pocas semanas apareció otro, encontrado por el coleccionista Eugene Costales entre unos sellos que consideraba repetidos.
Desde entonces no han aparecido más ejemplares, y los únicos dos conocidos han formado parte de algunas de las mejores colecciones de sellos de Estados Unidos, como las de Isleham, Schilling y Zoellner.
En contadas ocasiones han aparecido en subastas públicas. La mayoría de las veces han sido vendidos y comprados en tratos privados entre coleccionistas, en los que los precios se mantienen bajo reserva.
En 1998 uno de estos sellos fue subastado nuevamente por la casa Siegel de Estados Unidos, alcanzando un valor de 190.000 dólares.
Saludos
Patricio Canessa